Tanto el sol en verano como la lluvia y el viento en otoño e invierno, son los peores enemigos para los muebles de tu jardín. Aunque de normal los muebles de jardín son de materiales y acabados son resistentes, su mantenimiento regular fomenta su vida útil. En esta ocasión, te daremos unos consejos muy sencillos para conservarlos en buen estado el mayor tiempo posible.
- Tapa tus muebles con una cobertura resistente
En primer lugar, es recomendable apilar los muebles juntos y colocarlos donde menos corra el viento. Lo ideal para protegerlos es una buena funda de lona con unas cuerdas abajo para que quede bien cerrado. Así no le afectará ni el frío, ni el viento ni la lluvia. Otra opción similar es comprar un trozo de lona y fijar con cordones elásticos.
- Protege los muebles de madera
Hay productos especiales para cuando llega el mal tiempo y la lluvia. Se trata de un aceite con el que tenemos que cubrir todos todos los muebles de madera. Gracias a esto, conseguimos hidratar la madera tras el verano y protegerlos ante la humedad y la lluvia.
- Asegurar los muebles grandes al suelo
Además de cubrirlos como hemos dicho antes, también, se pueden anclar a la tierra como una solución ideal para que no sufran ningún daño. De esta forma, al no moverlos, no ocuparán sitio en espacios interiores.