Como comentamos ne el post anterior continuaremos dándoos más trucos para cuidar tus plantas cuando no estés en casa durante un largo periodo de tiempo.

Conos de Arcilla:

Este tipo de dispositivo tiene un hilo al que se conecta la boquilla de la botella de agua. Luego, el cono se entierra en el sustrato, con la botella en posición invertida. La microporosidad de la arcilla permitirá que el agua fluya y la distribuya por la tierra en una cierta dosis. Una botella de dos litros suele ser suficiente para mantener las plantas húmedas durante unos 15 días. Dependiendo de la porosidad del cono, el agua tardará más o menos en salir.

Existen diferentes versiones de este método: la botella se puede reemplazar por una serie de tubos de plástico que se insertan en un recipiente con agua. Antes de empujar el cono en el suelo, el cono debe llenarse cuidadosamente con agua para eliminar el aire que contiene. También es necesario comprobar si la altura del recipiente de agua es ligeramente más baja que el cono para evitar que el líquido se desborde debido a la gravedad.

¡Con este método, realmente sencillo y económico, podrás mantener tus plantas perfectamente regadas durante tu ausencia!

Agua Gelificada:

El principio del riego con agua en gel consiste en introducir una sustancia en un recipiente que tiene las características de absorber y retener una gran cantidad de líquido. Cuando se hidrata, esta sustancia adquiere una consistencia similar a un gel. Una vez abierto el recipiente, entrará en contacto con el suelo y el líquido contenido en el recipiente hidratará las plantas. Otra versión de este mismo sistema consiste en enterrar el contenedor en posición invertida en el suelo. En cualquier caso, el método más común y sencillo es: abrir, girar el hilo y poner el agua en gel en contacto con la tierra.

Mediante este sistema se puede mantener la humedad del suelo hasta por dos semanas según el grado de humedad del sustrato. En cualquier caso, el enfoque ideal es no dejar caer al menos algunos recipientes por cada maceta.

Otra versión muy atractiva y decorativa es una bola de gel de colores o transparente, que se puede colocar en maceteros y jarrones. Se compran secos en bolsitas, solo necesitas verterlos en un recipiente y agregar agua para lograr una consistencia similar a un gel.

Esperamos que estos útiles consejos te ayuden a disfrutar plenamente de los días de relajación y te den tranquilidad, porque cuando regreses encontrarás tus plantas favoritas tan hermosas y saludables como lo estaban cuando te fuiste.

¡Felices Vacaciones!